NEUROTICO

Author: Anónimo / Etiquetas:

la neurosis colectiva, que sufrimos en estos dias, a travez de los medios de comunicacion, nos mantiene en un estado de estres constante... siempre tensos esperando a ver de donde viene el balazo... gastamos energia en mantenernos adrenalinicos, gastamos psiquis pensando idioteces q no tienen sentido, y cuando crecemos?
somos aunque griten y pataleen cocreadores de nuestra propia vida
cuando te sientas en tu casa y/o cuarto te pido q pienses esto:
Esto es un reflejo de mí. Esto también es un reflejo de mí” Permite que tu conciencia asimile todo, y pregúntate:

¿Veo orden o desorden? ¿Veo mi singularidad? ¿Veo lo que siento en realidad? ¿Veo lo que quiero en realidad?
no todos los objetos de tu entorno responderán claramente a estas preguntas. si bien un departamento iluminado y de alegres colores representa un estado de ánimo muy distinto al de otro subterráneo y oscuro, Esta pluralidad se explica porque todos manifestamos y ocultamos al mismo tiempo quiénes somos. A veces expresamos nuestros sentimientos y otras nos distanciamos de ellos, nos negamos o utilizamos válvulas de escape aceptadas por la sociedad. El sofá que compraste sólo porque estaba de oferta, la pared blanca que no te importó pintar de otro color y el cuadro que no retiras porque es un obsequio de tus suegros, son también símbolos de tus sentimientos. Sin entrar en detalles, es posible echar un vistazo al espacio vital de una persona y determinar con bastante exactitud si está satisfecha o insatisfecha con la vida, si tiene una identidad firme o débil, si es conformista o inconformista, si prefiere el orden al caos, si se siente confiado o desahuciado.

Ahora pasa a tu círculo social. Cuando estés con tu familia o amigos, escucha con tu oído interno lo que ocurre. Pregúntate:

¿Escucho felicidad? ¿La presencia de estas personas me hace sentir vivo y animado?
¿Percibo un trasfondo de cansancio?
¿Se trata de un encuentro rutinario o hay una verdadera interacción entre las personas?
Las respuestas te ayudarán a valorar tu mundo y lo que ocurre en tu interior: quienes te rodean, al igual que los objetos, son un espejo.
Ahora concéntrate en el noticiario nocturno, y en vez de pensar que los sucesos ocurren “allá afuera”, refiérelos a tu persona. Pregúntate:
¿El mundo que veo es seguro o amenazador? ¿El noticiario me produce temor y consternación o me divierte y entretiene? Cuando se trata de una noticia mala, ¿presto atención sólo para entretenerme? ¿qué parte de mí representa este programa, la que pasa incesantemente de un problema a otro o la que busca respuestas?
desarrolla una nueva clase de conciencia: empiezas a romper el hábito de considerarte una entidad aislada. Descubres que el mundo entero está en tu interior.

0 comentarios: